Eduardo Rubio Elosúa
Es una aberración el seguir permitiendo la instalación de todos estos comerciantes informales sobre la Calzada de Fray Antonio de San Miguel, Plaza Morelos y sus inmediaciones, que por 23 días seguidos cuando ya son tan contadas las personas que rezan los cuarenta y seis rosarios celebrando a las cuarenta y seis estrellas que tiene el manto de la virgen de Guadalupe.
El día 12 de diciembre es el supuesto día de la aparición de la virgen en el Tepeyac y ese debe de ser el día de fiesta. Lo otro es simplemente fomentar el comercio informal sobre la vía pública, comercio que no paga impuestos ni de IVA ni sobre las ventas, ni IMSS, ni INFONAVIT a sus trabajadores.
Es aberrante que el H. Ayuntamiento no haya puesto un hasta aquí a todas estas organizaciones que operan fuera de la ley y de los reglamentos y solo dejan el lugar hecho un asco, apesta a orines por meses y con restos de caña por las calles de la calzada.
¿Quienes se benefician con todo esto? ¿Cuánto le cuesta al municipio la limpieza, la seguridad, el deterioro de las instalaciones y del monumento? ¿Por qué lo autorizan?
¿En qué otra parte del país se ha visto que una fiesta callejera dure veintitrés días? Las fiestas patronales, cuando mucho, duran tres días.
Seguramente estas organizaciones prometen su voto a quien más cancha les dé y de eso viven los políticos.¿A quién realmente le importa la ciudad? A quién le importa el daño que ocasionan a los comercios establecidos que sí pagan impuestos y a quienes multan inmediatamente el día que se atrevan a sacar unas mesas afuera de sus negocios.
Por este tipo de negociaciones que hacen los gobiernos municipales seguimos sin salir del hoyo. Utilizan su poder para su conveniencia personal y no para generar una mejor ciudad para todos. Sí Morelia no tiene un lugar en donde la gente pueda ir a divertirse sanamente pues lo más fácil es crear ese lugar y que éste funcione todo el año sin afectar a terceros.
Al parecer, las soluciones inteligentes no son algo que les interese a los gobiernos. Lo único importante es ¿cuántos votos me genera este permiso? ¿Cuánto dinero me llevo a mi bolsa si gano la elección?
El botín está en ganar la elección. Allí es donde sí se pueden enriquecer. Lo que realmente importa es cuánto dinero puede generar el puesto durante los tres años que dura cada administración.
No importa la ley ni los reglamentos, ni la moral, ni la ética, mucho menos el bien común. Esto en buen castellano se llama corrupción.Ojalá que algún día Morelia tenga gobernantes comprometidos que ofrezcan soluciones definitivas bien pensadas, conciliando intereses, apoyando a los comerciantes pero en lugares adecuados que tengan baños, área para lavar trastes y vajillas, juegos mecánicos y futbolitos de manera permanente en donde las familias puedan disfrutar todo el año incluso de las cañas.
No hay razón para seguir degradando uno de los monumentos excepcionales con los que cuenta la ciudad fastidiando a vecinos y escuelas (más de 2000 estudiantes) y a comercios bien establecidos.
Últimamente han metido barredoras a La Calzada y con ello han afectado a las juntas de las piedras que están hechas de mezcla pobre como debe de ser. A los de los Servicios Municipales no les importa el monumento. No saben lo que hacen. Estas juntas las acaban de reparar y ya se las están echando por imprudencia de los encargados de la limpieza.
Por favor, escuchen a los ciudadanos y usen su inteligencia para resolver inteligentemente un problema de carácter social, cultural, de salud pública, de corrupción y de contaminación ambiental.