• Pese a que en México se clasificó como una tormenta solar intensa, las únicas afectaciones reportadas son menores en las señales de radio.
El Servicio de Clima Espacial México (SCIESMEX) del Instituto de Geofísica de la UNAM informa sobre los efectos de la tormenta geomagnética registrada el 1 de junio de 2025, como parte del monitoreo continuo de la actividad solar y sus impactos sobre el territorio nacional.
Las tormentas solares y las tormentas geomagnéticas son fenómenos naturales que ocurren de manera regular. Al igual que los sismos, no es posible predecir con exactitud cuándo ocurrirán eventos severos o extremos. No obstante, el SCIESMEX mantiene una vigilancia permanente del Sol, el medio interplanetario, la ionosfera y el campo magnético terrestre, con el objetivo de generar conocimiento científico y mitigar posibles afectaciones a sistemas tecnológicos.
El viernes 30 de mayo a las 17:33 horas (tiempo del centro de México) se registró una fulguración solar clase M8, que generó un aumento en la absorción de señales de radio reflejadas en la alta atmósfera sobre el territorio nacional. Este fenómeno afectó particularmente las frecuencias menores a 5 MHz, con una duración estimada de entre algunos minutos y media hora.
Esta fulguración estuvo acompañada por una eyección de masa coronal (EMC) tipo halo, es decir, una nube de material solar proyectada en dirección a la Tierra, con velocidades superiores a 1000 km/s. La EMC alcanzó la órbita terrestre durante la medianoche del sábado 31 de mayo, provocando una tormenta geomagnética durante las primeras horas del domingo 1 de junio, con observación de auroras boreales en latitudes altas y medias reportadas en redes sociales, pero no se reportó visibilidad de auroras en México. El evento continúa en curso, aunque su intensidad ha disminuido y se espera que termine en las próximas horas.
La red de instrumentos del Laboratorio Nacional de Clima Espacial (LANCE) detectó los efectos de esta tormenta sobre el territorio nacional. El índice geomagnético planetario Kp alcanzó un valor máximo de Kp = 8, correspondiente a un nivel de severidad G4 (tormenta geomagnética severa). En contraste, en territorio mexicano se observó una intensidad menor, correspondiente al nivel G3 (tormenta geomagnética intensa).
Los detectores de partículas energéticas (rayos cósmicos) del LANCE registraron variaciones asociadas al evento. Asimismo, se identificaron alteraciones en la estructura de la ionosfera sobre México, las cuales pueden provocar degradación moderada en servicios de radiofrecuencia que dependen de la reflexión ionosférica durante el día. No se esperan afectaciones mayores, aunque los efectos pueden variar según el tipo de sistema afectado.
La Comisión Federal de Electricidad (CFE), en coordinación con el LANCE, mantiene el monitoreo del Sistema Eléctrico Nacional, sin que hasta el momento se hayan reportado anomalías operativas.
Es importante subrayar que, aunque esta tormenta fue significativa, su intensidad fue notablemente menor a la de los eventos registrados en mayo y octubre de 2024.
El Laboratorio Nacional de Clima Espacial continuará con el seguimiento de las condiciones durante las próximas horas y emitirá actualizaciones en caso necesario.
Las condiciones del clima espacial en México se reportan en tiempo real a través de la cuenta oficial de X: @SCIESMEX y en el sitio web del Servicio: www.sciesmex.unam.mx.
El SCIESMEX mantiene coordinación permanente con el Sistema Nacional de Protección Civil para el seguimiento y atención de este tipo de eventos.
